En un entorno laboral en constante evolución, el trabajo híbrido se ha convertido en una de las principales tendencias en la gestión de talento. Esta modalidad es una combinación de días presenciales con días de trabajo remoto; estrategia que busca darles mayor flexibilidad a los colaboradores.

Por otro lado, la flexibilidad por sí sola no es suficiente para garantizar la retención del talento más valioso. Las conexiones humanas se fortalecen mediante la interacción cara a cara y juegan un papel fundamental para crear una cultura organizacional sólida y un sentido de pertenencia.

El modelo de trabajo híbrido se ha vuelto relevante a nivel mundial con el paso de los años, donde un 63% de las empresas hoy en día ya lo implementan. Los beneficios de esta modalidad son evidentes: según datos recientes, el 80% de los trabajadores consideran que un modelo flexible mejora el bienestar.

Además, al tener un modelo flexible los niveles de traslado para los colaboradores se reducen y existe una mejora notoria en la productividad. Un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) encontró que, en la Zona Metropolitana de Valle de México, los trabajadores que usan el transporte público invierten un promedio de 71 minutos en llegar a su lugar de trabajo, mientras que los que usan vehículo privado invierten alrededor de 52 minutos diarios en su traslado. Esto resalta la importancia de ofrecer opciones de trabajo flexibles para optimizar los tiempos y el bienestar de los colaboradores.

Por otro lado, en la actualidad existe una preocupación sobre la posibilidad de que se pierdan las interacciones y conexiones humanas en un entorno completamente remoto. ¿Cuál es el impacto del trabajo híbrido en la retención de talento y como la convivencia en la oficina fortalece el compromiso de los empleados?

Es fundamental encontrar un equilibrio que combine la flexibilidad del trabajo remoto con las ventajas de la convivencia presencial. La interacción en persona toma un papel clave para fortalecer las conexiones humanas, fomentar un ambiente colaborativo y construir una cultura organizacional con sentido de pertenencia. Las organizaciones que priorizan estas interacciones pueden:

  • Aumentar la lealtad de los empleados.
  • Mejorar el compromiso organizacional.
  • Incrementar hasta un 21% su rentabilidad.
  • Aumentar un 25% su productividad.

El trabajo híbrido no solo es un beneficio para los empleados, si no que fomenta ambientes donde se sienten valorados y motivados.

trabajo híbrido

Erica Keswin, en su libro The Retention Revolution, enfatiza que la autonomía y la flexibilidad son esenciales para el éxito de los empleados y que el trabajo híbrido debe ir acompañado de estrategias que fortalezcan la cultura organizacional y el sentido de comunidad (Keswin, 2023). Para lograrlo, propone las ‘Tres P’ de la intención en el trabajo: Propósito, Presencia y Protocolo. Esta estrategia ayuda a que los empleados se sientan en sintonía con los valores de la organización, fomentando un entorno de colaboración y comunidad. No solo se trata de adaptar un modelo de presencialidad total, como el que maneja Amazon, sino de ser más intencionales en la forma que se fomentan las conexiones presenciales.

Empresas como Google y Microsoft han implementado con éxito modelos de trabajo híbridos, donde los días en los que los empleados asisten a la oficina son diseñados para la colaboración y la innovación, mientras que el trabajo remoto les da flexibilidad y autonomía. Este enfoque permite a los empleados tener un sentido de pertenencia sin sacrificar el trabajo desde casa.

Las interacciones cara a cara promueven un entorno colaborativo donde los empleados pueden intercambiar ideas, resolver problemas con mayor facilidad y fortalecer sus relaciones interpersonales. Según un informe de Gallup, los trabajadores que tienen relaciones sólidas con sus compañeros y líderes son más propensos a comprometerse con su empresa a largo plazo.  Esto demuestra la importancia de generar espacios de trabajo en donde se fomente la interacción humana y el trabajo colaborativo, logrando un sentido de comunidad en el que la retención de talento sea cada vez más evidente.

En mi opinión, es importante que las empresas implementen una modalidad que equilibre la flexibilidad con la conexión humana, donde los días presenciales estén diseñados para reuniones importantes y actividades que fortalezcan la cultura organizacional. Un estudio de McKinsey encontró que las empresas con altos niveles de compromiso y bienestar en sus empleados tienen un 23% más de probabilidad de éxito financiero en comparación con aquellas que no lo priorizan. Esto refuerza la idea de que un buen modelo de trabajo no solo impacta de forma positiva a los colaboradores, sino que también el rendimiento de la organización a largo plazo.

El bienestar de los empleados influye directamente en el éxito de la organización, por lo que es fundamental que los líderes establezcan un modelo que combine la flexibilidad y la interacción presencial. Al final, el trabajo híbrido no solo brinda flexibilidad, sino que también ayuda a crear conexiones más fuertes, fomentando un ambiente donde los empleados se sientan valorados y motivados.