El uso de landing pages (páginas de aterrizaje) es una práctica bastante utilizada en el mundo del marketing digital, ya que permite llevar al usuario a una página individual, aislada del sitio principal, en donde se le explica acerca de un producto en específico, una oferta de temporada, o algún evento en particular, con el objetivo de que realice una cierta acción, ya sea compartir datos, agendar una llamada, o descargar algún documento. 

 

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Si bien, es cierto que esto ayuda a mejorar la conversión, existen distintos factores que pueden estar afectando su desempeño y provocando que no se obtenga la tasa de conversión deseada. 

A continuación, se presentan algunos puntos que ayudarán a optimizar las landing pages utilizadas en las distintas campañas. 

1. Definir el objetivo de tu landing page 

Uno de los puntos más importantes es tener muy claro el objetivo de la landing page, ya que esto ayudará a definir su estructura. 

Algunos objetivos pueden ser desde incentivar al usuario a descargar cierto contenido de valor, llenar un formulario, llevarlos al sitio web para que realicen una compra, registrarlos para un evento, agendar una llamada, entre otros más. 

2. Contenido de la landing page 

Una vez que se tiene definido el objetivo a perseguir, es importante optimizar el contenido de la landing page, colocando la información que el usuario esperar ver. 

Si, por ejemplo, se busca que los usuarios se registren para un evento, es importante compartir la información del mismo: fecha, hora, ubicación (incluso, es posible agregar un mapa con ayuda de Google), un breve resumen de lo que vivirán durante el evento, información sobre los expositores (un poco de su trayectoria y alguna fotografía de ellos). Además, si el evento se ha realizado con anterioridad, se puede incluir un pequeño video con testimonios de lo que la gente opinó. Y, por último y más importante, un formulario donde puedan compartir información relevante para ti. 

Por otro lado, si se desea hablar acerca de un producto en específico, se deben explicar los beneficios que ofrece, incluir testimonios de clientes que avalen el producto o servicio y platiquen sobre los problemas que les ayudaron a resolver. También se podría agregar algún video corto explicando su funcionamiento, algunas preguntas frecuentes y, lo más importante,  un formulario en donde puedan enviar sus datos, de modo que el equipo comercial los pueda contactar para dar un seguimiento más puntual.

En caso de que la empresa tenga un e-commerce, se deben incluir diversos bloques en donde los usuarios puedan dar clic para visitar el sitio y realizar la transacción. 

Pueden sonar lógicos los ejemplos anteriores, sin embargo, existen ocasiones en las que las empresas saturan de información irrelevante la landing page, alejando al usuario del objetivo principal. 

Es muy importante respetar e informar con un texto relevante y claro lo que el usuario espera encontrar en la landing page, ya que, de lo contrario, es posible que abandone la página e, incluso, que genere una percepción negativa de la marca.

3. Velocidad de carga 

Una vez definido el contenido, de acuerdo con el objetivo, es necesario optimizar la carga de la landing page, debido a que, si es muy pesada, es posible que el usuario opte por salir de la página. 

Existen algunas técnicas para ayudar a la velocidad de carga, para las cuales generalmente se necesita la ayuda de un programador web. Para conocer algunas de áreas de mejora, existe una herramienta de Google, llamada PageSpeed Insights, la cual arroja los elementos que se pueden mejorar, como el uso de caché, JavaScript, códigos innecesarios, plugins, entre otros, por lo que, después de correr el análisis, es necesario que compartirle el reporte al equipo correspondiente. 

Un punto muy importante que se debe tomar en cuenta es el peso y la cantidad de imágenes en la página. Es necesario ser selectivo al momento de elegir las mejores, de forma que no afecte de manera significativa la carga de la landing page. 

El último punto para tomar en consideración es el servicio de hosting del dominio, ya que algunos pueden ser más lentos que otros. Al evaluar las distintas alternativas, es recomendable apoyarse con el programador web para conocer las necesidades a futuro del sitio y landing pages, con el objetivo de revisar y elegir la mejor opción. 

4. Longitud de formularios 

La longitud de los formularios es normalmente un punto de debate, entre preguntarle lo menos posible al usuario con el objetivo de captar la mayor cantidad de prospectos, o preguntarle lo más posible para conocerlo adecuadamente. 

Si bien, ambas posturas son válidas, la respuesta a lo que conviene más lo determinarán las necesidades de la empresa. A continuación, compartimos dos preguntas a tomar en cuenta al momento de decidir: 

  • ¿La empresa necesita urgentemente una cantidad grande de base de datos? Utiliza un formulario corto, con preguntas sencillas para que puedas contactarlo.

  • ¿Se cuenta ya con una cantidad grande de base de datos, pero el equipo comercial es pequeño contra la gran demanda? Utiliza un formulario largo y conciso con información que permita segmentar, así como priorizar a aquellos con mayor probabilidad de convertirse en clientes o con un mayor margen de rentabilidad.

Es posible que la empresa, aún sabiendo esto, no se encuentre convencida, por lo que también es recomendable realizar una prueba A/B, es decir, probar con una landing page que cuente con un formulario corto y otro con el formulario largo, y para poder evaluar cuál funciona mejor. 

A final de cuentas, es importante que se evalúe objetivamente lo que se considera un buen resultado. Es probable que con un formulario corto se pueda obtener una gran cantidad de prospectos, pero si, por ejemplo, de 100 registros, solo 20 se convirtieron en clientes, mientras que con un formulario largo, se obtienen 50 registros, pero 20 se convirtieron en clientes, el mensaje es claro.