Ya sea por la tecnología móvil, el big data, las redes sociales, o algún otro punto de disrupción digital; las empresas han buscado adaptarse en un entorno cambiante en donde saben que si no se adaptan, morirán.
No es ningún secreto que, en los últimos años, la tecnología ha sido parte esencial en el crecimiento de las empresas de una manera exponencial. De acuerdo con un análisis hecho por MIT Sloan Management Review, el 27% de los ejecutivos senior piensan que la transformación digital ya es un tema de supervivencia.
Existen nuevos canales para llegar a tu mercado meta, y nuevas herramientas para automatizar procesos que antes se hacían manualmente, representando esto una oportunidad única para ofrecer un servicio con una oferta de valor diferenciada a un menor costo.
Uno de los objetivos principales de los CEO’s es cumplir con los objetivos de utilidad de la empresa, y en cualquier industria, sin ayuda de la tecnología, será cada vez más difícil conseguirlo en un mercado cada vez más competido. Es por ello que es fundamental una transformación digital.
El Reto Digital
Para lograr una transformación digital exitosa en una compañía, es necesario primero entender el estado actual de la misma. Mckinsey & Company lo resume perfectamente en lo que llama Cociente Digital (Digital Quotient), enfocándose en entender la madurez y las capacidades digitales de una empresa, lista 4 puntos clave para saber si tu empresa esta lista para una transformación digital.
1. Estrategia
La visión y las metas que se establecen para lograr los objetivos de negocio digitales a corto y largo plazo.
2. Cultura
Las mentalidades y comportamientos críticos para captar las oportunidades digitales.
3. Organización
4. Capacidades
Los sistemas, herramientas, habilidades digitales y tecnología para lograr metas digitales.
De empresa tradicional a digital
Todo inicia con una estrategia digital clara. Es sumamente importante generar un plan estratégico digital para entender las oportunidades que existen en la industria y la inversión necesaria para capitalizarlas. De igual forma, es indispensable priorizar las oportunidades que existen, ya que no puedes darte el lujo de desperdiciar recursos humanos, tecnológicos o financieros en oportunidades que tengan un ROI bajo.
Adicional a la estrategia, el tema cultural es clave dentro de cualquier transformación digital. Los involucrados tienen que estar abiertos al cambio y a las mejoras que pueden existir al automatizar procesos y actividades. Su mentalidad debe de estar enfocada en entender que la innovación es un gran beneficio para la empresa y, en consecuencia, para ellos.
En mi opinión, resaltaría el involucramiento del CEO en el proceso de la transformación digital. Aunque dentro del punto de la organización se menciona el talento que apoya la ejecución de la estrategia digital, en mi experiencia puedo asegurar que los proyectos en los que se involucra al CEO tienden a ser más exitosos, ya que tienen una mayor influencia en todas las áreas de una empresa.
En cuanto al talento organizacional, en muchas ocasiones las habilidades digitales son encasilladas para los equipos de sistemas, marketing y ventas, sin embargo, es fundamental que ese talento exista a lo largo de toda la cadena de valor para asegurar una oferta diferenciada a un menor costo.
Por último, es clave tener las herramientas y las tecnologías adecuadas para lograr los objetivos de la transformación digital. Para ello, es importante entender en dónde está el negocio y qué oportunidades existen dentro de su industria. Esto hace imprescindible un diagnóstico de sus capacidades digitales, para así evaluar las mejores tecnologías disponibles que contribuyan a lograr los objetivos de negocio.